Radiador
La función principal de los radiadores es dispersar el calor del vapor generado por las calderas. El vapor disperso calienta la habitación. Los radiadores están hechos de hierro fundido, que es propenso a la oxidación. El óxido puede hacer que la pintura se desprenda y requiera volver a pintar el radiador. Antes de volver a pintar, primero debe quitar las capas de pintura del radiador.
Cosas que necesitarás
- Cepillo de alambre
- Raspador
- Máscara contra el polvo
- Lentes de seguridad
- Láminas de plástico o lonas
- Papel de lija
- Alcohol mineral o diluyente de pintura
Use anteojos de seguridad y una máscara antipolvo para evitar la posibilidad de inhalar partículas de plomo que pueden estar presentes en radiadores más antiguos.
Cubra el área alrededor del radiador con láminas de plástico para proteger los pisos.
Use el cepillo de alambre para raspar la pintura suelta y escamosa del radiador. Lije las áreas ásperas y oxidadas a fondo.
Aspire toda la superficie del radiador.
Limpie la superficie del radiador con una pequeña cantidad de alcohol mineral o diluyente de pintura en un trapo para terminar de limpiar las superficies.

Consejos y advertencias
- Los radiadores se pueden quitar y arenado profesionalmente.