Las pavimentadoras de concreto generalmente se instalan en patios, entradas y pasillos.
Las pavimentadoras de concreto son reconocidas por su versatilidad, estabilidad y diseños de enclavamiento. Si bien las pavimentadoras requieren un mantenimiento mínimo, no son invulnerables a las imperfecciones de la superficie. La sangre impregna los adoquines y los estropea con antiestéticas manchas rojas. Las proteínas en la sangre hacen que las manchas se adhieran más a los adoquines con el tiempo. Limpie rápidamente la sangre para evitar que se vuelva más inflexible y menoscabe el atractivo estético de los adoquines. Elimine la sangre de los adoquines de concreto utilizando ciertos suministros y técnicas.
Cosas que necesitarás
- Guantes desechables
- Toallas de papel
- Esponja
- Detergente líquido para platos
- Polvo de peróxido de sodio
- Cepillo de cerdas de nylon
- vinagre blanco
Póngase guantes desechables para proteger sus manos. Con toallas de papel, seque el exceso de sangre de los adoquines.
Sature una esponja con agua fría y dos gotas de detergente líquido para platos. Seque el concreto afectado con la esponja jabonosa para disolver la sangre.
Enjuague los adoquines y la esponja con agua para lavar la sangre y el jabón.
Examine los adoquines para la sangre restante. Si la mancha persiste, cúbrala con una capa de peróxido de sodio en polvo de acuerdo con las instrucciones que figuran en la etiqueta del producto. Deje que el polvo impregne la mancha durante el período de tiempo recomendado por el fabricante del producto.
Humedezca el peróxido de sodio con agua. Frote los adoquines afectados con un cepillo de cerdas de nylon hasta que la mancha de sangre se elimine por completo.
Enjuague los adoquines con abundante agua fresca para eliminar el peróxido de sodio.
Vierta vinagre blanco sin diluir sobre los adoquines para neutralizar cualquier rastro restante de peróxido de sodio.
Consejos y advertencias
- Use estas técnicas para eliminar las manchas de sangre de los adoquines.
- Pruebe el peróxido de sodio en un área pequeña y oculta de los adoquines para asegurarse de que no se decoloren.
