El polvo no solo hace que una casa se vea sucia, sino que también puede causar problemas a las personas alérgicas. El polvo en el hogar puede contener contaminantes, polen e incluso heces de ácaros del polvo que pueden crear reacciones en cualquier persona propensa a problemas respiratorios. La prevención de la acumulación de polvo es un proceso de varios pasos. Desafortunadamente, no hay una sola cosa que debe hacer. Sin embargo, si hace que el proceso sea un hábito, no tomará mucho más tiempo que la limpieza regular y tendrá un hogar más limpio e hipoalergénico.
Cosas que necesitarás
- Aspiradora (preferiblemente con un filtro HEPA)
- Trapeadores de microfibra
- Trapeadores de esponja
- Limpiadores de madera que repelen el polvo (Pledge o Endust, por ejemplo)
- Purificador de aire con filtro HEPA

Cómo prevenir la acumulación de polvo
Paso 1
Aspire los pisos alfombrados, las cortinas y todos los muebles tapizados al menos una vez por semana. El polvo se acumula fácilmente en estos, aunque no es tan visible como en otras superficies.
Paso 2
Rocíe las superficies de madera con un limpiador que repele el polvo. Además, mantenga las encimeras y electrodomésticos limpios y sin polvo, limpiándolos diariamente.
Paso 3
Coloque alfombras cerca de las entradas. Estos atraparán una gran cantidad de suciedad que se transporta en los zapatos. Trapear los pisos de baldosas húmedas al menos una vez por semana también evitará la acumulación de polvo. Si su hogar tiene pisos de madera, use una fregona de microfibra una vez por semana o con mayor frecuencia.
Etapa 4
Compre un purificador de aire que contenga filtros HEPA. Estos filtros pueden capturar pequeñas partículas de polvo. Si bien estos purificadores de aire no eliminarán todo el polvo del hogar, atraparán una gran parte de él.
Paso 5
Cambie todos los filtros, incluidos los filtros de horno y los filtros de aire acondicionado con frecuencia (al menos cada tres meses). Los filtros sucios no pueden hacer bien su trabajo.
