Nuestro pesto es fácil de encontrar: perejil, limón, nueces y aceite de oliva. Pruébelo en pan crujiente: el sabor brillante de limón y las hierbas frescas le dan sabor. Congélelo en porciones pequeñas y úselo para agregar distinción a las comidas: revuélvalo en arroz para un acompañamiento sofisticado o coloque una cucharada sobre un filete de pescado para un acabado elegante.
Cal / Serv: 347 Rendimientos: 8 Ingredientes 2 c. hojas de perejil de hoja plana 3/4 c. nueces tostadas y picadas 1/2 c. queso parmesano rallado 2 dientes de ajo 1/2 cucharadita. sal 1 c. aceite de oliva virgen extra 2 cdas. jugo de limón fresco 2 cucharaditas. ralladura de limón- Prepare el pesto: coloque el perejil, las nueces, el queso, el ajo y la sal en el tazón de un procesador de alimentos equipado con una cuchilla de metal. Pulso hasta que esté bien combinado. Combine el aceite, el jugo de limón y la ralladura en un tazón pequeño. Agregue la mezcla de aceite a la mezcla de perejil en una corriente lenta, pulsando para combinar. Servir de inmediato o congelar (ver Paso 2).
- Congele el pesto: divida el pesto en porciones preferidas y colóquelo en pequeñas bolsas de plástico con cierre hermético o en pequeños recipientes de plástico con tapas herméticas. Extraiga el exceso de aire del recipiente y congélelo por hasta 3 meses.