Espesar la salsa ya hecha, o engrosar una salsa que estás haciendo desde cero (¡ahora mismo mientras los invitados esperan!), Es mucho más fácil de lo que piensas. Solo necesita tres ingredientes y con unos pocos pasos simples, tendrá una salsa rica y sabrosa sin grumos a la vista. Comience con los jugos de un asado de pavo, pollo, cerdo o ternera asado o simplemente use mantequilla con caldo de pollo. El proceso es el mismo en ambos sentidos, y funciona perfectamente todo el tiempo.
Cómo espesar la salsa ya hecha
¿Intentas espesar la salsa que ya has comenzado? Saque una sartén separada y comience el proceso a continuación: derrita la mantequilla, agregue la harina y cocine por 2 minutos. Use su salsa como líquido para el Paso 3. Batir y llevar a ebullición. Su salsa debe estar espesa.
Cosas que necesitarás
- 1/4 taza de mantequilla (o grasa para cocinar de cualquier proteína asada)
- 1/4 taza de harina
- 1 1/2 tazas de caldo (o goteos de cocina)
- Sal y pimienta para probar
Propina
Esta receta hace suficiente salsa para 4 a 6 personas. Si está organizando un grupo grande, duplique la receta y asegúrese de agregar un poco más de tiempo de cocción a cada paso.
Cómo espesar la salsa que estás haciendo desde cero
Use cantidades iguales de grasa y harina. Si está comenzando con las gotas de un pavo asado, pollo asado o carne de res asada, use un separador de grasa como primer paso. Luego siga el resto de estas instrucciones.
Paso 1: derretir la mantequilla
En una sartén, derrita la mantequilla.
Paso 2: agrega harina
Batir una cantidad igual de harina en la sartén con la mantequilla.
Revuelva a fuego medio hasta que la harina se haya cocinado, aproximadamente 2 minutos.
Paso 3: vierta el líquido
Mientras continúa batiendo, vierta lentamente el caldo (o los jugos para asar) en la sartén.
Paso 4: llevar a ebullición
Permita que la salsa se espese al hervir la sartén. Cocine durante aproximadamente 2 minutos para un lote pequeño como este (doble esta vez si duplica la receta) hasta que su salsa comience a reducirse. Agregue un poco de sal y pimienta según sea necesario, saboreando a medida que avanza.
Sirva sobre puré de papas, relleno, rociado sobre pavo o carne, o simplemente en un tazón de salsa sobre la mesa.