Esas maravillosas lámparas de lava de los años 60 presentaban manchas de colores que flotaban arriba y abajo en la base cilíndrica de la lámpara, formándose y reformando en forma de amebas. El efecto fue fascinante, al menos hasta que los globos se convirtieron en un gran globo y dejaron de moverse mucho cuando la lámpara se apagó. Hoy, usted y sus hijos pueden hacer su propia lámpara de lava con ingredientes domésticos comunes. Esta lámpara de lava se basa en la creación de burbujas de dióxido de carbono formadas al mezclar vinagre y bicarbonato de sodio. Los resultados son temporales, pero deberían durar al menos el tiempo de atención de su hijo.
Cosas que necesitarás
- Botella de plástico transparente de cualquier tamaño.
- Agua
- Vinagre
- 4 cucharaditas de bicarbonato de sodio
- Colorante alimenticio
Llena la botella ¾ llena de agua. Agregue vinagre a menos de dos pulgadas de la parte superior de la botella. Puede usar botellas de cualquier tamaño, desde una botella de refresco de 12 onzas hasta una jarra de galón.
Espolvorea el bicarbonato de sodio en la botella lentamente, una cucharadita a la vez. No lo tires o el contenido de la botella se formará como un volcán de clase científica.
Agregue colorante alimentario, un par de gotas a la vez hasta que el agua tenga el tono que desea.
Da un paso atrás y mira el espectáculo. Las burbujas de bicarbonato de sodio y vinagre impulsarán las gotas de colorante en patrones impredecibles. Agregue más bicarbonato de sodio para continuar el espectáculo.
Consejos y advertencias
- Puede suspender objetos pequeños como granos de arroz o lentejuelas brillantes en la lámpara de lava.